07 Abr 2022
Economía circular
La segunda mano está transformando los armarios de los consumidores
La ropa de segunda mano sigue ganando cuota de armario; bienvenidos al armario del futuro y la circularidad textil.
Según GlobalData, la cuota del mercado de segunda mano se prevé que crezca en 9 puntos durante los próximos 10 años, más que cualquier otro sector. La reventa, el alquiler y la suscripción serán los sectores de más rápido crecimiento en los próximos 10 años, por consumidores que buscan diversión y comodidad en su forma de vestir. En cambio, la cuota de mercado del fast fashion permanecerá más o menos en el mismo plano que actualmente durante los próximos 10 años.
Muchos compradores de fast fashion se pasan al ahorro
Se estima que la reventa de ropa de segunda mano sea dos veces mayor que el fast fashion para el 2030.
- 2 de cada 5 compradores dicen que están reemplazando las compras fast fashion por ropa de segunda mano.
- Un 45% de los millennials y la generación Z dicen que se niegan a comprar a marcas y negocios no sostenibles.
- 1 de 4 compradores dicen que desde que empezó la pandemia, les importa menos comprar las últimas tendencias en moda.
La generación Z tiene una mentalidad totalmente nueva en torno al tipo de consumo de ropa, tiene hábitos de moda más circulares.
Desechable = Reutilizable
La generación Z es un 165% más probable que tenga ropa de reventa que los Boomers.
Propietario único = Múltiples propietarios
La generación Z es un 83% más probable que estén de acuerdo en que la ropa se convierta en una propiedad temporal.
Desechable = Vender
La generación Z es un 33% más probable que revendan ropa que los Boomers.
El papel de la reventa en el futuro de la moda
Muchos minoristas del sector textil están dispuestos a introducir la reventa de ropa de segunda mano entre su estrategia omnicanal para satisfacer la demanda de los consumidores, ya que el 43% de los consumidores dicen que es más probable que compren a una marca que les permita intercambiar ropa vieja por crédito de marca
34% de los consumidores dicen que es más probable que compren a una marca que ofrezca ropa de segunda mano además de ropa nueva y un 32% de los consumidores dicen que es más probable que vean una marca de alta calidad y concienciada con el planeta si venden ropa nueva y de segunda mano.
Los motivos por los que los minoristas del sector del textil quieren introducir la reventa en su línea de negocio son los siguientes:
- Ser más sostenibles
- Adquirir nuevos clientes
- Atraer a un público más joven
- Generar ingresos
- Mantenerse relevante
Pero, ¿cómo planean introducir en su estrategia esta nueva línea de venta?
Aunque muchos de estos negocios no tienen claro todavía cómo se va a plantear, por este motivo un 60% de los negocios del sector textil planea asociarse con un negocio de reventa ya existente. Un 28% planea introducirlo en su propio negocio desde cero mientras que tan solo un 8% se plantea adquirir un negocio de reventa de ropa de segunda mano.
La razón principal por la que muchos negocios se plantean asociarse con un negocio existente de reventa es porque actualmente no están preparados para gestionar logística de reventa.
La reventa de ropa de segunda mano actualmente representa menos de un 1% del volumen total de ropa vendida por los negocios que han abierto tiendas de reventa. 101,2M de las prendas de vestir que fueron vendidas en 2020 por negocios con líneas de reventa, solamente 560K de las prendas eran de segunda mano.
El análisis incluye una lista selecta de negocios que lanzaron públicamente reventa entre sus líneas, incluidos: Patagonia, REI, Lululemon, Levi’s, Eileen Fisher, Arc’teryx, Taylor Stitch, The North Face y Tommy Hilfiger.
El mercado de segunda mano está en auge y las marcas se están dando cuenta. Pero vender ropa de segunda mano en línea supone un desafío. Cada prenda debe clasificarse, catalogarse, fotografiarse e introducir en una base de datos. Pero, dado que la reventa de ropa es un mercado en auge, los negocios deberán considerar sus opciones.
Cathaleen Chen, corresponsal de The Business of Fashion.
Actualmente, la moda se basa en un modelo lineal muy perjudicial, que representa aproximadamente el 10% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero.
Moda lineal
Alrededor del 70% de las emisiones producidas por el sector de la moda provienen de actividades upstream, como la producción de telas. La cultura actual de fast fashion agrava el problema, ya que el consumidor en muchos casos desecha la prenda después de sólo 7 u 8 usos.
Moda circular
Extender la vida útil de la ropa desvía los textiles de los vertederos y reduce los recursos utilizados en la producción de prendas. Comprar un artículo de segunda mano elimina la necesidad de fabricar un artículo nuevo, reduciendo así su huella de carbono un 82%.
El futuro de la moda debe ser circular.